Pongamos que el niño, Billy, deseaba tener una PlayStation 4 por navidad. La broma consistiría en lo siguiente: conseguir una caja de la consola de Sony y rellenarla con algo para que pese. Envolverla muy bien y totalmente a fondo. Luego preparar el escenario: mañana de navidad, apertura de regalos. Y cámara en mano grabar la reacción del niño en cuestión.
Hay reacciones para todos los gustos. Desde las de los niños que se quedan totalmente decepcionados y que no saben dónde meterse debido a la tristeza, hasta las de aquellos que se enfadan o rompen a llorar. Hay de todo, pero en general la idea se encuentra en regocijarse en la forma en la que se rompen las ilusiones de los más pequeños. En algunas ocasiones, eso sí, la forma en la que se les trata se encuentra justificada, al menos según lo que cuentan sus padres y familiares.
No sabemos si es una buena o mala idea como forma educativa de reformar a los más pequeños, pero está claro que este tipo de vídeos está teniendo mucha popularidad en YouTube y otras páginas de vídeos. Es lógico si recordamos que los niños son los únicos capaces de mantener la ilusión y espontaneidad de las personas, algo que se materializa muy bien en los vídeos que circulan por la red. Si os suena la situación, eso sí, sabréis lo que se siente cuando te dan uno de estos varapalos.
Vía: Kotaku