La compacta Samsung L210 se presenta con dos cualidades que no son fáciles de encontrar en esta clase de cámaras: controles manuales y estabilizador óptico. Y, además, también graba vídeo y detecta las caras de nuestros modelos para compensar la exposición.
El objetivo con zoom óptico de 3 aumentos (34-102 mm equivalentes, f/2.8-5.2) de la Samsung L210 no es tan potente como el de la inalámbrica Panasonic Lumix DMC-TZ50, pero no podemos tenerlo todo. Lo que sí tenemos es un sensor de 10,1 megapíxeles con sensibilidad máxima de 1600 ISO y una pantalla de 2,5 pulgadas con brillo automático.
En el apartado de ayudas al fotógrafo, además del estabilizador óptico y la detección facial, la Samsung L210 incluye estabilización digital, reducción de ojos rojos y los obligados modos de escena automáticos, donde destaca el modo especial para retratos.
La grabación de vídeo admite una resolución máxima de 800 x 592 píxeles a 20 fps. Para conseguir los anhelados 30 fotogramas por segundo hay que bajar hasta calidad VGA (640 x 480 píxeles), que tampoco está nada mal para un vídeo improvisado.
La compacta y versátil Samsung L210, que se nutre con tarjetas SD/SDHC, debería estar disponible en las próximas semanas con un precio alrededor de los 250 a 300 euros.
Vía Xataka.
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