El pasado sábado arrancó en Alemania la edición 2011 de la famosa Oktoberfest, una tradición que Alemania ha exportado al resto del mundo y que lleva celebrándose desde 1810. Durante 17 días, Múnich se convierte en la capital mundial de la cerveza, las salchichas y los trajes regionales bávaros.
Para la edición de este año se espera la presencia de un total de 6 millones de asistentes en la Oktoberfest. El año pasado se consumieron más de 7 millones de jarras de cerveza (a un litro por jarra). La asistencia al evento es gratuita, pero la cerveza se paga a precio de oro: este año el precio de cada jarra de cerveza era de 9,20 €.
Además de beber mucha cerveza y comer productos típicos alemanes, durante la Oktoberfest también se toca música regional y hay un desfile de trajes tradicionales. En la imagen que encabeza este post, capturada por Matthias Schrader (AP Photo) el pasado 17 de septiembre, vemos a varias jóvenes alemanas vistiendo el traje regional de Bavaria mientras intentan coger una gran jarra de cerveza en la Oktoberfest de Múnich.
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